CIUDAD DE DIOS

Fecha: 30/10/2003. Pases: 20:00 y 22:30 horas

Nacionalidad: Brasil Año: 2002 Género: Drama Duración: 135 minutos Director: Fernando Meirelles, Katia Lund Intérpretes:Matheus Nachtergaele, Seu Jorge, Alexandre Rodrígues, Leandro Firmino da Hora Guión: Braulio Mantovani. Basado en la novela de Paolo Lins. Director de Fotografía: César Charlone Música: Antonio Pinto, Ed Cortes Producción: Andrea Barata Ribeiro, Mauricio Andrade Ramos Distribuidora: Vértigo Seleccionada por Brasil para los Oscar. Festival de Cannes 2002. Festival Internacional del Mar del Plata 2003. Mejor Película, mejores actores, premio de la Crítica y Premio Glauber Rocha de la prensa extranjera en el Festival del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana.

Años 60: Buscapé tiene 11 años y es sólo un niño más en Cidade de Deus, un suburbio de Río de Janeiro. Tímido y delicado, observa a los niños duros de su barrio, sus robos, sus peleas. Ya sabe lo que quiere ser si consigue sobrevivir: fotógrafo. Dadinho, un niño de su misma edad, sueña con ser el criminal más peligroso de Río y empieza su aprendizaje haciendo recados a los delincuentes locales. Años 70: Buscapé sigue estudiando, trabaja de vez en cuando y camina por la estrecha frontera que separa el crimen de la vida “honesta”. Dadinho ya tiene una pequeña pandilla y grandes ambiciones. Principios de los 80: Buscapé finalmente consigue una cámara y así hace realidad el sueño de su infancia. Dadinho también ha hecho realidad su sueño: a los 18 años es conocido como “Ze pequeño”, el narcotraficante más temido y respetado de Río. Su palabra es la ley en Cidade de Deus. El director Fernando Meirelles y la codirectora Katia Lund, reunieron a 110 jóvenes actores no profesionales y durante ocho meses trabajaron con ellos en un taller especial. Aprovecharon este periodo para enriquecer la película con sus experiencias personales, el lenguaje y la capacidad de improvisación de los jóvenes. Además de la historia, basada en una investigación profunda de la realidad, destaca el dinámico ritmo de la narración cinematográfica, la excelente fotografía y la dirección de actores. La película ha puesto ante los ojos de la opinión pública internacional la violencia que se vive en las 620 favelas de Río de Janeiro, donde reside el 10% de su población. Gracias al filme, Cidade de Deus, con sus 200.000 habitantes, va a ser escogida por el presidente Lula da Silva para comenzar en ella una serie de proyectos sociales. Para el autor del libro Paulo Lins, la violencia en la realidad es aún mayor que en la película y ha sido un puñetazo en el estómago para la clase media brasileña, que sabe que existen las favelas, pero las ven sólo de lejos. El escritor piensa que la experiencia que va a comenzar en Cidade de Deus puede ser la única esperanza de rescate, porque se funda en la preparación y las oportunidades de trabajo de los jóvenes. “Katia Lund había desarrollado varios trabajos de investigación en Río de Janerio y conocía muy de cerca de muchas personas de esos barrios. Gracias a ello pudimos entrar en Cidade Alta y obtener el visto bueno de los capos para poder filmar allí” Fernando Meirelles. “Se puede convertir en la película más sorprendente, excitante y libre de este año. Lo primero que va a llamar la atención a cualquier espectador que se acerque a este desgarrador film es lo eléctrico, frenético y desgarrado de su realización”. Diego Vázquez *****. “El carácter autóctono y el componente social e histórico de Ciudad de Dios imprimen al film un grado de veracidad que le permite marcar distancia con las típicas cintas sobre la mafia que suele traernos el cine anglosajón”. Tonia Palleja **** “Una película que aspira a convertirse en un título clave del realismo del tercer mundo, una película de visión indispensable, un grito de protesta ahogado por el envilecimiento global de la población, la complicidad de todas las clases sociales y el sufrimiento como rutina..” Mateo Sancho *****. “Ciudad de Dios, que fue apoyada por Walter Salles, el director de Estación Central de Brasil, es una obra urgente, que debe ser vista. En la favela Ciudad de Dios, las muertes, las torturas, son tan habituales como el esfuerzo de quienes viven en ella por vivir, por sobrevivir, hundidos en la miseria, desprotegidos del amparo estatal, maltratados por las fuerzas policiales, y excluidos de la sociedad. Pero la vida, se sabe, se dice, se abre paso, el espíritu vital fluye, y siempre encuentra Muestra un ámbito que se presume infernal, don de la violencia es la forma cotidiana de relacionarse, pero lo muestra desde su humanidad, desde su lógica intrínseca, sin miradas escrutadoras, hipócritas, cínicamente educativas. Sebastián Russo.***** “Para esto se inventó el cine” New York Times ***** Fernando Meirelles: Nació en Sao Paulo en 1955. Arquitecto y realizador de comerciales. Ciudad de Dios es la tercera película que rueda. Su anterior película Domesticas fue un éxito. Prepara para el 2004 una comedia dramática sobre la globalización: Intolerancia.